El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, ha colocado hoy la primera piedra de las obras de la tercera fase del proyecto de modernización del regadío de la comarca segoviana del Carracillo, que impulsará esta zona de cultivos hortícolas (zanahorias, puerros, cebolletas, lechugas), uno de los polos productivos de este sector en la provincia de Segovia.

Durante el acto institucional, García-Gallardo ha puesto de manifiesto la importancia de un proyecto que permitirá regar 3.000 hectáreas, 1.500 en cada campaña de riego.

Esta actuación da inicio a la tercera fase, que ya se esperaba desarrollar desde 2005, del proyecto de modernización integral de la comarca de El Carracillo, que se ha planeado para, con recursos superficiales del río Cega, abastecer de agua de riego a los municipios en los que no existe un acuífero superficial: Arroyo de Cuéllar, Chañe, Fresneda de Cuéllar, Remondo y Sanchonuño.

El vicepresidente de la Junta ha asegurado que "para este proyecto existen numerosos estudios que demuestran que hay equilibrio entre el respeto al medio ambiente y la actividad agrícola".

La obra de esta tercera fase se trata de una batería de sondeos que suministrarán el agua subterránea extraída del acuífero superficial, denominada zona almacén, a una balsa en Gomezserracín, para su posterior impulsión a las redes de riego, permitiendo, así, mejorar la calidad del agua y abaratar los costes a los agricultores.

El proyecto tiene un presupuesto de 18,3 millones de euros y será ejecutado mediante una encomienda de gestión a la empresa TRAGSA.

El vicepresidente de la Junta ha estado acompañado por el consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Gerardo Dueñas; el director general del Itacyl, Rafael Sáez; el presidente de la Diputación Provincial de Segovia, Miguel Ángel de Vicente Martín; el delegado de la Junta en Segovia, José Luis Sanz Merino; representantes de la Comunidad de Regantes y alcaldes de las localidades beneficiadas por el proyecto.