El presidente de VOX, Santiago Abascal, ha aprovechado una visita a sus compañeros de Segovia para valorar la postura de VOX Castilla y León sobre el proyecto de Presupuestos Generales de 2026, presentado la pasada semana por el gobierno regional,  de los que ha vaticinado que si se presentan "sin hablar con la oposición,  son  presupuestos condenados al fracaso, son los presupuestos de quien no tiene ninguna voluntad de aprobar los presupuestos, sino únicamente justificar algún discurso político".

Abascal ha recordado cómo en Murcia, la Comunidad Valenciana o Baleares "han logrado aprobarse los presupuestos precisamente porque algunas de las medidas que solicitaba VOX han sido aceptadas".

Para el líder político esta es la razón de fracaso que estima para Castilla y León, que ha hecho extensiva a Extremadura y Aragón y ha rematado repitiendo que "parece que no tienen ninguna voluntad de aprobar los presupuestos".

Sobre el caso particular de sus compañeros de partido en Segovia, donde sus dos concejales en la ciudad han votado en contra de las ordenanzas fiscales 2026, alegando precisamente la falta de negociación entre el PP y ellos, Abascal ha acusado a los populares de intentar imponer su voluntad y ha asegurado que "el Partido Popular está muy acostumbrado a utilizar el trágala con Vox; cree el PP que VOX tiene algún tipo de deber místico por el cual tiene que aprobar todo lo que pongan encima de la mesa".

Santiago Abascal ha asegurado que "es sorprendente que después de todos estos años en los que VOX ya ha tenido presencia pública, una gran representación, aún piensen en el PP que tienen ese derecho sobre VOX".

Para Abascal, la estrategia popular de forzar a VOX a votar a su favor es errónea, pues "no hay ningún tipo de chantaje que puedan hacer a VOX para votar a favor de ninguna de las iniciativas que planteen, sin hablar con VOX".

El líder de la formación conservadora ha asegurado que desde su partido no se pretende "imponer los planteamientos propios, cuando no se tienen todos los votos, pero como VOX sí tiene una parte de la representación, no se puede seguir maltratando y faltando al respeto a los votantes de VOX de esa manera". Abascal ha sido rotundo al afirmar que "no cuenten con VOX cuando no consultan a VOX".

Sobre el proceso electoral de Castilla y León, ya en la línea de salida, con fecha tope del 15 de marzo para las elecciones regionales, Santiago Abascal ha asegurado que en su partido están "deseando que sean convocadas esas elecciones, cuanto antes; no solo las elecciones en Castilla y León, sino las elecciones en Andalucía y en todos aquellos lugares donde se está gobernando en minoría".

Sobre esta postura respecto al calendario electoral, ha extendido su argumento a nivel del Estado, para "devolver la voz a los ciudadanos, con las elecciones nacionales que debían haber sido convocadas hace mucho tiempo, por la corrupción absoluta que rodea al gobierno, a su familia (por el presidente Sánchez) y a todo su entorno".

Y para finalizar, sobre las declaraciones que parece que cada vez van subiendo de tono entre el PP y VOX en Castilla y León, previas al clima electoral, respecto a la posibilidad de renegociar un pacto similar al del inicio de la legislatura actual, Abascal ha señalado que "será mucho más fácil renegociar ese gobierno si está VOX en primer lugar y el Partido Popular en segundo lugar, porque VOX sabe respetar a otras fuerzas políticas que también tienen representación y con las que se puede estar dispuestos a pactar".

La crítica sobre la forma de gestión política del PP de Castilla y León se ha repetido cuando ha afirmado que "el Partido Popular sigue pensando que tiene algún tipo de derecho de pernada sobre VOX, y va a ser muy difícil que se acostumbren al hecho de que los votos no pertenecen a ningún partido, ni al PP, ni al PSOE, ni a VOX ni a nadie: pertenecen a los ciudadanos, que eligen en cada convocatoria, pero ellos (por el PP) viven con una idea absurda, anclada en el pasado, que parece que alguien les ha robado unos votos que les pertenecen, y eso les dificulta mucho las negociaciones con otros partidos".